La UE adopta sus primeras conclusiones para mejorar el bienestar psicológico de los trabajadores

La ministra de Trabajo en funciones, Yolanda Díaz, ha manifestado que «la lucha contra la precariedad es uno de los mejores antídotos para prevenir los riesgos psicosociales en el trabajo»

Se ha celebrado recientemente el Consejo de Empleo, Política Social, Sanidad y Consumidores (EPSCO) en Luxemburgo, enmarcado dentro de la Presidencia Española de la comisión de la Unión Europea. El encuentro ha estado presidido por Yolanda Díaz, ministra en funciones de Trabajo y Economía Social; y José Luis Escrivá, ministro en funciones de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.

Tras el encuentro, el consejo ha adoptado el primer conjunto de conclusiones sobre la interrelación entre la salud mental y el empleo, con especial atención al trabajo precario. «La lucha contra la precariedad es uno de los mejores antídotos para prevenir los riesgos psicosociales en el trabajo», ha manifestado la actual ministra de Trabajo en funciones.

gualmente, ha añadido que «estas conclusiones suponen un paso importante hacia el reconocimiento de las repercusiones de la salud mental y para la promoción activa del bienestar psicológico de las trabajadoras y los trabajadores«.

Por ello, estas conclusiones instan a los países miembros a adoptar distintos planteamientos. Entre ellos, se les ha invitado a promover políticas de empleo de calidad para combatir la precariedad; reforzar los sistemas públicos que salvaguardan la salud mental en el trabajo; y promover la investigación sobre la salud mental en el trabajo.

Igualmente, los países europeos deberían apoyar la contratación o la reintegración laboral de las personas con problemas de salud mental, y, a su vez, apoyar a las personas que trabajan de forma autónoma y a las pymes en la prevención de los riesgos psicosociales en el trabajo.

Las conclusiones también van encaminadas a nuevas acciones dentro de la propía Comisión Europea. Así, el consejo insta a este órgano a reflexionar sobre una política adecuada para abordar los riesgos psicosociales en el trabajo; tener en cuenta el derecho a la desconexiócomo medida de prevención; y fomentar la coordinación de las iniciativas nacionales sobre la gestión de riesgos psicosociales en el trabajo.

Finalmente, se ha puesto encima de la mesa la necesidad de proseguir con un diálogo social que ponga en valor la mejora de las condiciones de trabajo y la necesidad de sensibilizarse sobre el bienestar psicológico de los trabajadores.

Comparte esta noticia:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *